Solzhenitsyn

“Los dirigentes bolcheviques que tomaron Rusia no eran rusos, ellos odiaban a los rusos y a los cristianos. Impulsados por el odio étnico torturaron y mataron a millones de rusos, sin pizca de remordimiento… El bolchevismo ha comprometido la mayor masacre humana de todos los tiempos. El hecho de que la mayor parte del mundo ignore o sea indiferente a este enorme crimen es prueba de que el dominio del mundo está en manos de sus autores“. Solzhenitsyn

Izquierda-Derecha

El espectro político Izquierda-Derecha es nuestra creación. En realidad, refleja cuidadosamente nuestra minuciosa polarización artificial de la sociedad, dividida en cuestiones menores que impiden que se perciba nuestro poder - (La Tecnocracia oculta del Poder)

miércoles, 20 de abril de 2011

Descubro y acuso (V): Las familias detrás del tráfico de drogas

Viene de aquí.

AL SERVICIO DE LO SECRETO

Lo más asombroso, por paradójico, es la ausencia de tenebrosidad en semejante actividad, libre de todo aspecto de conspiración. Para estas familias las cosas son así y siempre lo han sido, con la misma normalidad con que toman el té de la tarde. Se deben a su propia dinámica interna, a la raíz medular de su existencia. Su religión no es el Anglicanismo cristiano que profesan públicamente, sino una mezcla de paganismo que incluye cultos satánicos como la Teosofía y el Rosacrucismo.

La ideología central, sincrética, del culto a la vida propia de la oligarquía es la resurrección del culto egipcio de la droga, el mito de Isis y Osiris, el mismo culto anticristiano que desarrolló a través del Imperio Romano. Y como las antiguas dinastías egipcias entregadas al culto de Isis, las redes de la familia inglesa dirigente han mantenido el poder durante siglos guardando los secretos de sus intrigas «dentro de la familia».

El culto de Isis formó el núcleo del rito escocés de la Masonería, de Lord Palmerston. Como Primer Ministro durante las dos primeras Guerras del Opio, Palmerston empleó variantes de esta ideología para tejer una red de conexiones que van desde la Orden de Sión, en Rumanía, al Ku Klux Klan en los Estados Unidos. El culto de Isis, en versión moderna, fue la ideología oficial de los dirigentes británicos políticos y financieros y de los personajes literarios durante el siglo pasado. Su gran exponente público fue el secretario de Colonias durante la Segunda Guerra del Opio, Edward Bulwer Lytton, autor de Los últimos días de Pompeya, primer popularizador del culto de Isis y mentor de toda la generación de imperialistas británicos de Cecil Rhodes.

El Royal Institute of International Affairs fue la «sociedad secreta» llamada a realizar el testamento de Rhodes y es el cuerpo del que se nutre el estado mayor para la estructura del tráfico de droga. Pero el Royal Institute mismo fue fundado por un grupo todavía más secreto: el «Círculo de Iniciados entregado a la extensión del Imperio Británico», según palabras de uno de sus historiadores. El «Círculo de Iniciados» incluía a Lord Milner, a Cecil Rhodes (fundador del imperio minero británico en África, al después ministro Arthur Balfour, a Albert Grey y a Lord Rothschild. Todos ellos celebraban formas de culto a Isis.